Capítulo 04
Horas después...
Danielita estaba dormida abrazada a su peluche nuevo, mientras que
Camila y Daniel estaban afuera de la habitación de la pequeña
CAMILA: Daniel, estoy pensando en buscar un veterinario para la Mal Querida
DANIEL: ¿Por qué?
CAMILA: Porque quiero dedicarme por completo a mis hijos, a ti, a mi familia
DANIEL: Bueno, si tu quieres que así sea yo estaré de acuerdo en todo
CAMILA: Gracias, es que con lo que paso con Daniela...
DANIEL: Tranquila, la niña ya está bien
CAMILA: De igual manera, quiero contratar a un veterinario, esa idea ya
la tenía rondando por la cabeza pero con esto que paso, no me quedan
dudas, lo voy a hacer
DANIEL: Yo me encargo de contactar a uno
CAMILA: ¡Perfecto!
DANIEL: ¿Te vas a quedar hoy, verdad?
CAMILA: Por supuesto, ¿vas al rancho?
DANIEL: Si, voy a ver a los niños y me quedo allá, ¿quieres que te traiga algo?
CAMILA: Ropa, lo único
DANIEL: Bueno, voy y te empaco algo y le digo a Rodolfo que la traiga (le da un beso) Te amo
CAMILA: Yo a ti (le da un beso)
Daniel se fue y Camila entro a la habitación donde estaba la pequeña,
verla abrazada fuerte a su peluche le causo una gran sonrisa, le dio un
beso a la pequeña y se sentó en el sofá que estaba en la habitación
Rato después, tal vez unos veinte minutos, Daniel iba llegando al
rancho. Entro al cuarto de las pequeñas y vio dormida a Ximena, fue al
cuarto de Camilo e igual, pensó que Agata estaría igual pero no, la luz
estaba apagada pero se escuchaba el llanto desconsolado de una pequeña
que creía que todo era su culpa
DANIEL: (entrando con cuidado) ¿Agata?
AGATA: ¿Te pasa papi?
DANIEL: (se acerca y prende la luz) Eso me pregunto yo, ¿por qué lloras, princesa?
AGATA: Pote pot mi tulpa, Naniela le salió sane de la nadiz ("Porque
por mi culpa, Daniela le salió sangre de la nariz") (se puso a llorar de
nuevo)
DANIEL: (la abraza) No princesa, no fue por tu culpa
AGATA: Si pote yo le pede en la nadiz ("Si porque yo le pegue en la nariz")
DANIEL: No fue por tu culpa, mi niña, pero tampoco debiste de haberle pegado, ustedes son hermanas y tienen que quererse mucho
AGATA: (lo mira) ¿Naniela esta mien?
DANIEL: Si, ella está muy bien, es más, para que veas que no te miento, ¿te parece si mañana temprano te llevo a verla?
AGATA: ¡¡Shiiiiii!! (Le da un beso) Dacias papi, edes el mejod
DANIEL: (le da un beso en la frente) Te amo, princesa, que descanses
AGATA: Tu idual, te amo
Daniel apago la luz y salió de la habitación, se fue a su cuarto,
preparo un poco de ropa para Camila para que Rodolfo se la llevara
enseguida, el iría temprano pero era mejor que Camila estuviera cómoda
Al día siguiente...
Camila despertó temprano y vio que su princesita seguía durmiendo, le
dio un besito en la frente y la dejo dormir otro rato mas, mientras ella
aprovecharía para darse una ducha
En el rancho, Daniel estaba
durmiendo cuando de repente, entraron los tres niños, se le subieron
encima a su papa y empezaron a hacerle cosquillas
XIMENA: ¡Adibaa papi, adibaa!
DANIEL: Nooo, un rato mas
AGATA: Adiba papi, vamos a ved a Naniela
CAMILO: ¡¡Shiiiii!!
DANIEL: Mmmm, cinco minutos (estaba despierto pero se hacia el dormido)
AGATA: (gritando) ¡¡ADIBAAAA!!
DANIEL: Ya voy (abre los ojos) Veo que amanecieron muy activos hoy
XIMENA: ¡Adiba papi, vamos a ved a Naniela!
DANIEL: ¿Si, verdad? Claro, yo se los prometí, ya me voy a duchar para
que bajemos a desayunar y después si podamos ir a ver a Daniela,
¿entendido?
NIÑOS: ¡¡¡SIIIIIII!!!
DANIEL: Bueno, vayan a lavarse sus dientes para ir a ver a su hermanita
De vuelta al hospital, Camila salía de la ducha ya vestida, en el
momento en que sale, Danielita abre sus ojos, igual de verdes los de su
mama
CAMILA: (se le acerca y le da un piquito de madre e hija) Hola preciosa, ¿cómo amaneciste?
DANIELA: Me guele mucho la nadiz (casi llorando)
CAMILA: No llores, mi vida, ya ahorita llamamos al doctor para que te de una medicina que te quite el dolor, ¿si?
DANIELA: Shi, me guele mucho
CAMILA: Ya vengo, mi amor, voy a llamar al doctor
Camila salió en busca del doctor o de alguna enfermera pero no encontró
a nadie, solo la recepcionista que le dijo que la mayoría de doctores y
enfermeras estaban en quirófano, al parecer un hombre había tenido un
accidente automovilístico. Entro de nuevo a la habitación pero ya la
niña estaba un poco más calmada, el dolor estaba disminuyendo
Daniel estaba llegando al hospital, le pidió a Rafael que buscara en
internet un buen veterinario para la Mal Querida, le explico la
situación y cuando llego al lugar cortó la llamada para ayudar a los
pequeños
DANIEL: (alza a Ximena en sus hombros y les dio la mano a Agata y Camilo) Se van a portar bien, ¿entendido?
NIÑOS: ¡Si papi!
DANIEL: Bueno, ahora sí, a ver a su hermanita
Los cuatros entraron al hospital y fueron directamente hasta la
habitación de la pequeña. Al entrar, encontraron a madre e hija comiendo
y riéndose a carcajada
DANIEL: ¿Cuál es la risa, hermosas?
DANIELA: ¡¡PAPI!!
NIÑOS: ¡¡Hedmanita!!
CAMILA: (se acerca a Daniel y le da un beso) Hola, guapo
DANIEL: ¿Cómo pasaron la noche?
XIMENA: (se acerca) ¿Mami, nos podemos subid a la tama?
CAMILO: Shi mami, déjanos
AGATA: Pod favod
CAMILA: Esta bien, pero con mucho cuidado porque su hermanita esta operada
NIÑOS: ¡¡¡SIII!!!
Rafael estaba buscando en internet los mejores veterinarios de México,
de repente el nombre de uno de los que salían le llamo la atención,
parecía como si hubiera escuchado alguna vez de ese nombre
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